Argumento:
Siete adolescentes se escapan unos días de vacaciones a la cabaña que tiene en la montaña uno de ellos, en donde estará esperando la novia de este con una buena lumbre en la chimenea y un montón de cerveza. Están dispuestos a emborracharse como locos y a follar en donde sea. Pero cuando llegan no hay nadie esperando, al contrario, les atraca una visita inesperada, un hombre de los alrededores que con seriedad advierte a los jóvenes de un suceso ocurrido allí durante la segunda guerra mundial con un pequeño batallón nazi.
Reseña:
Aceptable y entretenida comedia gore que satisfará a los aficionados de estas películas de antaño. Con gratificantes escenas que contienen exceso de sangre, metros y metros de intestinos, y desmembraciones graciosas, vamos, un deleite para los que nos gusta de vez en cuando ver una película de este género, lástima que estas escenas aparezcan aproximadamente a partir del ecuador de la película. Este es el único tropiezo que desde mi punto de vista tiene el filme. Tommy Wirkola, reúne en esta película todos los ingredientes necesarios para una comedia gore. ¿Y las interpretaciones de los actores? Ni fu ni fa, más bien pasables, porque este género tampoco exige unas interpretaciones complejas y delicadas. Son papeles bastante simples y facilones que los actores y actrices elegidos ejecutan con acierto, como el típico friki gordito, el guaperas cabecilla de la manada, el listillo de turno, las siempre aceptables tías buenas, estudiantes adolescentes, que se agradecen en este tipo de películas, pero eso sí, con la introducción de un nuevo personaje; un aspirante a doctor que se marea al ver la sangre. Un caso singular que irá tomando protagonismo conforme se acerca el final y que no defraudará en absoluto a, como ya he mencionado antes, los amantes de la comedia gore.
La historia con la que se enlaza la aparición de los zombies no está nada mal y los zombies en sí, bueno, están bien conseguidos y tienen sus momentos de seriedad y de cachondeo, como exige la película. Otro detalle a tener en cuenta es el escenario; una pequeña cabaña solitaria en mitad de una montaña nevada. Un colorido que hace resaltar aún más el color de la sangre.
Ya saben, si les gusta este tipo de género, no duden en ver esta película acompañada de un buen aperitivo.
Nandy Puertollano
Un cachondeo de film. Puede que no sea una obra magistral que pase a los anales del cine, pero muy buena para pasar un rato de humor bastante macabro. Muy bueno el detalle del momento motosierra en plan Evil Dead, tras haberlo mencionado prácticamente al principio.
ResponderEliminarSí, señor, buenísimo ese momento, puede que el mejor de la película. Tú lo has dicho, no será una obra maestra que pase a la historia del cine, pero es un descojone muy bien montado. Saludos.
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