Siguiendo la moda de los revivals 80´s y teniendo en cuenta que la saga de Indiana Jones tuvo un gran éxito de críticas y taquilla no es de extrañar que al maestro Spielberg y compañía se les ocurriese resucitar la serie con un nuevo capítulo el año 2008. Bajo el subtítulo del reino de la calavera de cristal nos encontramos con la cuarta parte de arqueólogo, aventurero y mujeriego más conocido de Hollywood interpretado nuevamente por un Harrison Ford más maduro que mantiene sus buenas dotes como actor de género.
Si tengo que ser sincero cierto temor recorrió mi cuerpo cuando me entere de la noticia de que Steven Spielberg se había decidido a realizar una nueva película de Indiana Jones; una más que mala experiencia con otras franquicias como Jungla de Cristal, Robocop o Pesadilla en Elm Street junto con el ansia de algunos por exprimir sin mesura la gallina de los huevos de oro que habían sido en su momento, no auguraban resultados satisfactorios, pero ... por suerte esta vez no ha sido así. Con esto no quiero decir que Indiana Jones y el reino de la calavera de cristal sea una película redonda, ni siquiera mejor que las anteriores, pero si que puedo afirmar que es una buena película, tremendamente entretenida, ágil, divertida y excitante, vamos que tiene todo lo que se puede pedir de un producto de este tipo y cumplirá perfectamente las expectativas de los fans de toda la vida y los posibles nuevos neófilos. Esta claro que Spielberg es un maestro en lo que hace y además lo sabe hacer muy bien. Indiana es un personaje al que los años lo han vuelto más reflexivo, un poco más tranquilo y menos ágil (aunque menudas escenas de acción que se casca el bueno de Jones, ni con 20 años lo hubiera echo mejor) pero igual de fanfarrón, irónico y faltón con sus enemigos, en este caso espías del KGB y soldados de la antigua unión soviética. Personalmente he echado de menos a esos nazis tan pesados y ridículos que habían estado buscándole las cosquillas a Indiana, aunque debo reconocer que la escena dl lanzamiento de la bomba atómica en una zona de pruebas propia de la guerra fría es inolvidable. Como no, el patrón del guion vuelve a repetirse, este a lo mejor uno de los puntos flojos de la nueva entrega, la falta de originalidad y del efecto sorpresa, un hecho que suele pasar en este tipo de sagas.
Se han incorporado nuevos personajes ( como el prota de Transformers, lo siento no voy ha buscar el nombre del actor, sabéis quien es), un profesor colega de Indy y un más que ligue que tuvo hace años y que en un momento dado le confiesa a Indiana un secreto que se veía venir desde su aparición en la cinta. Todo este elenco se completa con uno malos muy malos que obligan a Indiana a darles lo que quieren, una calavera de cristal extrañamente antropomórfica y que recuerda a cierto bicho que protagonizo una interesante película de ciencia ficción junto a siete pasajeros dentro de una nave llamada Nostromo bajo la frase <En el espacio nadie podrá escuchar tus gritos (no dio más)>. Con todo esto, una pirámide Maya y unos cuantos indios sudamericanos que intentan no ser nuevamente ocupados como siglos atrás, pues ya tenemos el plato servido. Puntos a favor: el encanto de los personajes es innegable, a veces un poco exagerados pero nunca excesivos, se les coge cariño rápidamente. La historia enganchan, envuelve y entretiene a más no poder, las escenas de acción son increíbles (si si IN CRE I BLES) y están realizadas de manera magistral, se nota la mano de S.S. Esta todo, TO DO lo que una nueva entrega de la saga debe tener y de manera notable. Puntos en contra: son menores pero vamos a sacarle la punta al lápiz. Personalmente creo que aunque los efectos especiales son infinitamente mejores que en las entregas anteriores (el tiempo ha pasado y los avances han sido increíbles)se abusa un poco de ellos frente al trabajo manufacturado que dominaba en los 80. Por otro lado la mística y el esoterismo que rodeaban la búsquedas arqueológicas de Indiana (sobre todo en El Arca Perdida junto al gran Sean Connery, al cual se le hace un guiño durante la película) deja paso a unos misterios extraterrestres más propios de la guerra fría o de un capitulo de Expediente x. No es que este hecho haga perder interés al argumento pero creo que Indiana se mueve mejor en espacios del más allá que no de otras galaxias (Han Solo ???) aunque cualquiera de estos temas tendría lugar en un programa de Iker Giménez y su nave de misterio.
Como he dicho anteriormente el peso de lo positivo gana de muuuuucho a las posibles pegas o defectos que le podemos encontrar a la nueva (y no ultima) entrega de Indiana Jones; un personaje que ha envejecido muy bien y que sobretodo se le ha tratado con un respecto infinito y merecido. El hecho de que haya sido el propio Spielberg el encargado de la dirección y que Harrison Ford se haya mantenido tan bien física y mentalmente a facilitado el más que buen resultado de la película, pero sobretodo quiero remarcar el respecto y buen hacer de todas las partes. Si todo sigue así ojala que nos quede Indiana Jones para años. Por cierto ¿Dónde esta el látigo?
R.Alfaro.
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