No hace muchos días se cumplió el veinte aniversario del disco -A Fine Day To Exit- de los británicos Anathema. Un disco que fue el paso definitivo al cambio total del estilo de la banda, algo que esta gente ya dejo claro con anteriores trabajos como -Altenative 4 (1998)- y -Judgement (1999)-. Es por eso, que todo aquel seguidor de esta banda ya esperaba un cambio tan drástico como este. Y es que era muy obvio que los hermanos Cavanagh querían apostar por un sonido más melódico dejando atrás los ritmos pesados y Doom...
Nunca hubo la menor duda de la excelencia musical de estos hermanos, ni sorpresas cuando las mentes abiertas de los Cavanagh declararon su predilección por las melodías más cautivadoras y los sentimientos más íntimos...
Siendo este disco una evolución clara y natural de aquel lejano -The Silent Enigma-, en el cual el cantante y guitarrista Vincent Cavanagh empezó a cantar, nos podemos esperar la confirmación del cambio y diversidad musical del futuro de Anathema. El disco comienza con unas notas de piano que dan paso a la nueva forma de transmitir música por parte de esta banda británica. “Pressure” es una trallazo emocional (como todo el disco) en toda regla , que emana influencias de grupos paisanos como pueden ser Pink Floyd y Radiohead muy claramente. Con un primer tramo donde la voz inconfundible de Vincent y las guitarras acústicas llevan todo el peso, llega esta puta maravilla llamada “Release”. La canción también muestra de que época es, pero siempre con los ingredientes sonoros propios de esta banda.
Con un comienzo que me recuerda a la suavidad musical de unos míticos Pink Floyd, el tema “Looking Outside Inside”, de repente nos sorprende en mitad del tema con una explosión rítmica y vocal de psicodelia. Genial !!!. Llega la que es para mi la joya de la corona, “Leave No Trace”, simplemente buena, bonita y barata... sencilla en su composición pero totalmente adictiva. Sera cuestión de gustos, pero para mi es pura magia dentro de un disco no acto para salir en noche vieja, o por lo menos yo no lo haría. Tras este estallido de emoción por mi parte, continuamos con el tema “Underworld”, una canción que a mi personalmente su estilo musical me recuerda a todas aquellas bandas de Brit Pop de finales de los 90 principios del 2000. Un gran tema que tiene más contundencia y fuerza sonora pero sin llegar a algo de los inicios musicales de la banda.
La belleza en algunas composiciones son dignas de admirar, y “Barriers”, es uno de esos temas. Música relajante con un trabajo vocal espectacular por parte de Vincent, bien acompañado por una voz femenina. Un chorreo de melancolía y emociones con especial peligro para los que fumen porros por posibles escapadas a otros mundos jejeje...
El premio al tema más “Metal” del disco sin duda se lo lleva el tema “Panic”. Una canción que la banda interpreto en su actuación en una edición del extinto Atarfe Vega Rock, y que provoco que la peña perdiera la puta cabeza provocando lluvias de cerveza, hostias y alguna rotura de gafas...Bestial. Un no parar de emociones es lo que nos ofrece la banda con el tema que le da titulo a este álbum. Un comienzo melancólico para acabar totalmente distorsionada. Hasta ahora, no hay ni un solo tema de relleno y el último, “Temporary Peace”, no podía ser menos. Una canción que llenara tu alrededor de melancolía y paz, un final a la altura, sin duda.
La banda escogió una portada que según parece tiene su truco por decirlo de alguna manera. Lo que parece una decisión trágica en la portada, en la contraportada parece que ha habido una reflexión positiva. No entiendo que este -A Fine Day To Exit- no llegase a cotas mucho más altas, ya que este disco tiene todo lo que tiene que tener para cautivar a los seguidores de toda la vida y otros oyentes con la mente bien abierta y la piel sensible.
No quiero enrollarme mucho más y solo os aconsejo una escucha a este disco de principio a fin sin ninguna prisa. Una mezcla de melancolía y paz inundara tu alma....
J.Arcos
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