En mis primeros y lejanos años como aficionado del Heavy Metal, sabia quien eran los Sabbath pero nunca les preste mucho interés ni había escuchado nada de ellos. No fue hasta que en la tienda de música Disc Center de Badalona me compre el mini Ep de Anthrax llamado `I´m the Man´, donde había una versión del tema “Sabbath Broody Sabbath” que me bolo la puta cabeza. Pero no seria hasta unos años más tarde ya en Granada cuando un colega me presto para que escuchara el `Speak of the Evil” de Ozzy y el `Tyr´ de Black Sabbath, donde mi fascinación por la banda y el cariño y amor por este ultimo disco se disparo a niveles paranoicos...
Iommy volvió a contar con los mismos músicos de su anterior
disco Headless Cross, a sí volvemos a disfrutar de
la genial pegada del baterista Cozy Powell, de la magnifica
ambientación de los teclados de Geoff Nicholls y de la voz de Tony
Martin, que en esta ocasión también se encargaría de escribir
todas las letras del disco. La nueva incorporación fue el bajista
Neil Murray (Whitesnake, Gary Moore..), dando un punto más de
calidad a esta banda si es que no había bastante.
Bueno,
vamos ha meternos en materia, el disco comienza con la que para mi es
una de las mejores canciones compuesta bajo el nombre de Black
Sabbath, una de las canciones más épicas, místicas, mágicas,
fantásticas... de la banda, “Anno Mundi”. Esta
canción es un autentico regalo para los oídos, todo gracias a la
impecable pegada del fallecido Cozy Powell a la batería acompañado
por un gran Neil Murray. Y que decir del trabajo de Geof Nicholls,
creando una excelente ambientación sonora con sus teclados en este
tema. “Anno Mundi” es un tema con subidas y
bajadas de ritmo que te golpean en el alma, con especial mención al
breve y fantástico bajón a la mitad del tema para luego pegarte el
subidon final, un puto orgasmo para los oídos....Tony Martin se
cubre de gloria con esta canción demostrando su inmensa calidad como
vocalista. Y que decir de los riff diabólicos de Iommy...
El
segundo tema de este disco “The Law Maker” llega
bajo un imparable ritmo de batería de Powell. Una canción muy
directa, muy Hard Rockera, alejándose de la épica en la que están
metidas la casi totalidad de los temas de este trabajo. Aunque
desentona un poco con el resto del disco no deja de ser un gran tema
típico de los Sabbath. El tercer tema del disco “Jerusalem” contiene
esos riff místicos de Iommi que en este tema son acompañados por
unos teclados igual de místicos, ambos se te meten en la cabeza sin
posibilidad de resistencia. Creo que con esta canción cualquier duda
sobre si Tony Iommi y Tony Martin harían una buena dupla quedan
totalmente despejada. Con “The Sabbath Stones” parece
que la banda quiere hacer un homenaje a sus primeros tiempos, con una
tonalidad sonora más Doom y oscura. En definitiva este parece creado
en la etapa con Ozzy como cantante.
Llegamos
a la parte digamos que curiosa del disco, los tres temas que vienen a
continuación que bien podían definirse como una canción dividida
en tres partes, hechas en un sentido conceptual donde se tratan las
leyendas del dios Odín. La primera es la intro “The Battle
of Tyr”, donde unos teclados en modo épico nos abren el
camino al siguiente corte... “Odin´s Court”, donde
nos encontramos un medio tiempo con tintes bluseros, el cual el bueno
de Dave Coverlade hubiese dado hostias por tenerlo en su discografía.
Y por último y para cerrar esta pequeña trilogía sobre el dios
nórdico llega el temazo “Valhalla”, donde
pasamos de lo acústico al Metal de corte más clásico y donde
oiremos a Martin haciéndose pedazos vocalmente en los magníficos
estribillos de este corte. Magnifica!!!
“Feels
Good to Me” la
balada del disco, la primera canción que a mi me metio de lleno en
este trabajo. Una balada Made in Sabbath con riff de guitarra
brutales y unos teclados sumamente elegantes. Aunque no hay duda de
que el trabajo vocal de Martin en esta balada es muy bueno, no puedo
dejar de destacar la ejecución del resto de la banda en este tema,
simplemente espectacular!!. Llegamos al final con “Heavens
in Black”,
que junto al segundo tema de este trabajo son las que más desentonan
con el conjunto del disco. Es más hard rockera que épica, una
canción básica de los Sabbath que quizás sea la que menos me ha
gustado de todo el disco, pero no por ello es mala si no que a mi me
desentona demasiado. Cuestión de gustos.
Creo sinceramente que este
disco no tuvo la suficiente publicidad por parte de la compañía y
eso provoco que una obra de arte como esta pasase desapercibido,
aunque también es verdad que muchos seguidores de Sabbath nunca
admitieron a Tony Martin como vocalista de la banda, a pesar de ser
el segundo vocalista con más años en la banda. Yo le diría a todos
aquellos que despreciaron esta etapa de la banda que le vuelvan a dar
una nueva oportunidad, quien sabe, lo mismo cambian de opinión.
J.Arcos
No hay comentarios:
Publicar un comentario